Inflación en México desacelera a 3.61% en la primera quincena de noviembre, su nivel más bajo en más de un año

Economía 25/11/2025Industrial InsiderIndustrial Insider
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La inflación general anual en México se ubicó en 3.61 por ciento durante la primera quincena de noviembre de 2025, según reveló el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), lo que representa un respiro en la tendencia de alzas de precios y consolida la trayectoria descendente observada desde el cierre de 2022. El dato representa no solo una desaceleración respecto al mismo periodo de 2024 —cuando la inflación anual fue de 4.56 por ciento—, sino también uno de los niveles más bajos en más de doce meses, en un entorno económico marcado por ajustes en subsidios y presiones externas moderadas.

En su informe técnico difundido este lunes 24 de noviembre, el organismo detalló que el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se situó en 142.470 puntos, con un incremento de 0.47 por ciento respecto a la quincena previa. Aunque se trata de un repunte moderado en términos quincenales, fuentes cercanas al seguimiento de política monetaria consideran que la inflación anualizada mantiene un comportamiento favorable, en línea con las expectativas del Banco de México y con márgenes de maniobra más amplios para futuras decisiones de tasa de interés.

Al interior del índice, el componente subyacente —clave para medir la trayectoria estructural de los precios al excluir productos con alta volatilidad— mostró un incremento marginal de 0.04 por ciento quincenal. Este comportamiento fue impulsado por un alza de 0.25 por ciento en los servicios, mientras que las mercancías registraron una baja de 0.19 por ciento, lo cual sugiere una contención en los precios de bienes de consumo duradero y semiduradero.

En contraste, el índice no subyacente presentó un aumento significativo de 1.93 por ciento en la primera mitad de noviembre. Dentro de este rubro, los precios de frutas y verduras crecieron 1.34 por ciento, y los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno se dispararon 2.92 por ciento. Desde el interior de la operación se ha conocido que este repunte estuvo directamente vinculado con la finalización del subsidio a las tarifas eléctricas de temporada de verano, medida que impactó a consumidores de 11 ciudades del país, reflejando la alta sensibilidad del componente no subyacente a decisiones administrativas y estacionales.

Entre los productos genéricos con mayor incidencia en la inflación destacan la electricidad, el transporte colectivo, los servicios de alimentación popular como loncherías y taquerías, así como los servicios profesionales, todos con incrementos de precios notables. Por el contrario, se observaron disminuciones en el costo de algunas bebidas alcohólicas como el vino de mesa, el tequila y el ron, cuya baja contribuyó a contener parcialmente el índice general.

El Índice de Precios de la Canasta de Consumo Mínimo, que agrupa 170 bienes y servicios esenciales, aumentó 0.71 por ciento en la quincena y 3.69 por ciento en su comparación anual. Este comportamiento, aunque por encima del INPC general en su variación quincenal, es inferior al registrado en el mismo periodo de 2024, cuando las tasas fueron de 0.54 y 4.27 por ciento, respectivamente, lo que refuerza la narrativa de una inflación en desaceleración incluso en los sectores de mayor impacto para los hogares de menores ingresos.

El panorama inflacionario de México se ha moderado de forma constante desde 2022, cuando el índice cerró en 7.82 por ciento, su nivel más alto del siglo para un cierre de año. Posteriormente, en 2023 descendió a 4.66 por ciento y culminó 2024 con una tasa de 4.21 por ciento. La lectura más reciente refuerza la expectativa de que el país podría cerrar 2025 con una inflación por debajo del 4 por ciento, siempre que los factores estacionales y las decisiones regulatorias no introduzcan nuevas presiones significativas. En este contexto, analistas anticipan que el Banco de México podría revisar su postura monetaria con mayor flexibilidad de cara al primer trimestre de 2026, aunque manteniendo la cautela ante un entorno global aún incierto.

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