OMC alerta sobre sobredependencia global de EE.UU. y China; pide reforma para fortalecer resiliencia comercial

La directora general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Ngozi Okonjo-Iweala, advirtió sobre la creciente sobredependencia del sistema comercial internacional en dos actores clave: Estados Unidos como mercado principal y China como proveedor de insumos críticos. Durante su participación en la Cumbre de Líderes del G20 celebrada en Johannesburgo, la funcionaria instó a impulsar una reforma profunda que refuerce la resiliencia del comercio global y minimice las vulnerabilidades actuales.

“El sistema de comercio mundial fue construido para la interdependencia, no para la sobredependencia”, sentenció Okonjo-Iweala, al recordar que durante la pandemia de COVID-19 se evidenció que la excesiva concentración en ciertos actores y regiones debilitó la capacidad de respuesta global, especialmente en el suministro de vacunas.

Ante esta situación, la titular de la OMC propuso diversificar el comercio mediante la descentralización de las cadenas de suministro, con énfasis en regiones como África. Señaló que el fortalecimiento de las cadenas de valor regionales y subregionales permitirá no solo reducir riesgos en caso de nuevas crisis, sino también impulsar la generación de empleos y el desarrollo económico en los países que hoy solo exportan materias primas.

“Necesitamos agregar valor a nuestros productos. Si África continúa exportando mayoritariamente productos básicos, que representan cerca del 60 por ciento de sus exportaciones, las cosas no cambiarán”, enfatizó. Agregó que el continente africano posee el 30 por ciento de los minerales críticos del mundo, lo que representa una oportunidad clave para desarrollar industrias locales y avanzar hacia productos finales.

Durante la cumbre, los líderes del G20 adoptaron una declaración conjunta que respalda la cooperación multilateral en materia de comercio y desarrollo sostenible. El documento aborda temas como el cambio climático, el manejo de la deuda, la sostenibilidad de las cadenas de suministro y la necesidad de establecer un marco para los minerales críticos.

Este marco, de carácter voluntario y no vinculante, busca garantizar que los recursos minerales críticos se conviertan en motores de prosperidad mediante cadenas de valor más sostenibles, estables, transparentes y resilientes. Asimismo, promueve la diversificación de rutas y mercados para reducir la exposición a tensiones geopolíticas, desastres naturales y futuras pandemias.

La directora de la OMC concluyó que este enfoque no solo es vital para el desarrollo económico, sino también para garantizar la estabilidad del sistema comercial global en un contexto internacional cada vez más volátil y fragmentado.