Nearshoring impulsará inversión de 400 mil millones de dólares en infraestructura para México hacia 2032
Nearshoring02/11/2024Industrial InsiderEl fenómeno del nearshoring, que está atrayendo a México a empresas de Asia, Estados Unidos y Europa, generará una demanda sin precedentes en infraestructura hídrica, energética, sistemas de transporte, así como en la construcción de parques industriales, vivienda y servicios, informó el Instituto Mexicano del Transporte (IMT). Para satisfacer estas necesidades, el país requerirá una inversión de más de 400 mil millones de dólares en los próximos ocho años.
“El capital necesario debe destinarse a la edificación de obras e infraestructura clave para capturar la oportunidad del nearshoring”, precisó el IMT, organismo dependiente de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT).
De acuerdo con los datos, se prevé que la llegada de empresas extranjeras aumente un 62% la demanda de parques industriales, un 54% la capacidad de agua, un 53% el consumo de energía y un 24% el uso del transporte. Para cumplir con estos requerimientos, México deberá invertir 250 mil millones de dólares en transporte, 79 mil millones en el sector energético, 27 mil millones en infraestructura hídrica, y 48 mil millones en la expansión de parques industriales.
El nearshoring, que se aceleró a partir de 2017 debido a las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, se ha consolidado en México en los últimos años. Factores como la pandemia de COVID-19 y el conflicto entre Rusia y Ucrania han resaltado la necesidad de una cadena de suministro más resiliente y flexible, lo que hace a México, junto con otros países como Vietnam, Indonesia y Marruecos, un punto estratégico para la relocalización de empresas.
Estos “países conectores” facilitan la globalización entre las superpotencias en un entorno marcado por tensiones geopolíticas y el avance del proteccionismo, explicó el IMT. En este sentido, México se beneficia de una nueva etapa de la globalización denominada “fragmentación económica”, donde nuevas economías integran los flujos comerciales internacionales y operan como un vínculo indirecto entre China y Estados Unidos.
Desde la imposición de aranceles a China por parte de Estados Unidos en 2018, empresas de origen chino han comenzado a establecerse en México, reorganizando sus cadenas de suministro para aprovechar las ventajas arancelarias y los procedimientos aduaneros simplificados del T-MEC. Este acuerdo permite a las empresas extranjeras constituidas en México acceder a los mismos derechos y privilegios que las empresas nacionales, lo que hace al país aún más atractivo para las inversiones.
El IMT subraya que el éxito de México en esta nueva etapa de la globalización dependerá de su capacidad para mantener el equilibrio entre las grandes economías y responder a las demandas crecientes de infraestructura.