Huelga de estibadores en EE. UU. impacta puertos de Altamira y Veracruz: riesgo de costos logísticos más altos

La reciente huelga de 50 mil estibadores en los principales puertos marítimos de la costa Este y el Golfo de Estados Unidos, que duró tres días, ha generado consecuencias negativas para los puertos mexicanos de Altamira y Veracruz, los cuales ya enfrentan congestión en sus muelles, retrasos en la entrega de mercancías y un posible aumento en los costos de distribución. Así lo informó Juan Pablo Pacheco, presidente de la Asociación Mexicana de Agentes de Carga (Amacarga).

A pesar de que la huelga en Estados Unidos ha llegado a su fin, Pacheco señaló que los efectos en los puertos mexicanos se sienten de manera inmediata debido al alto volumen de carga que manejan regularmente. La acumulación de contenedores y el desvío de buques hacia estos puertos está generando una sobrecarga en la infraestructura portuaria, lo que podría prolongar considerablemente los tiempos de procesamiento y despacho de mercancías.

El paro, que afectó desde Maine hasta Texas, fue el primero de este tipo desde 1977. Los estibadores estadounidenses reclamaban un aumento salarial del 77 por ciento a lo largo de los seis años de vigencia de su contrato, lo que provocó el cierre temporal de los puertos el pasado 1 de octubre.

El líder de Amacarga explicó que la interrupción de la cadena de suministro en EE. UU. y el aumento del tráfico en los puertos mexicanos podrían extender los tiempos de tránsito marítimo, afectando los plazos de entrega de mercancías críticas. Además, Pacheco advirtió sobre un potencial incremento en los costos logísticos, debido al mayor uso de almacenamiento y manejo de mercancías en los puertos nacionales, lo que repercutiría en el costo final para los importadores.

Ante esta situación, Pacheco instó a mantener una comunicación constante con las autoridades y trabajar en sinergia con todos los actores de la cadena de suministro para mitigar los efectos de la congestión y mejorar los tiempos de entrega.

“La clave para enfrentar este problema será la colaboración entre todas las partes involucradas, con el objetivo de ayudar a optimizar la logística y garantizar que la mercancía llegue lo más pronto posible a su destino final”, concluyó el presidente de Amacarga.