Nearshoring en la frontera sufre golpe con pérdida de 100,000 empleos

Especialistas alertaron sobre un enfriamiento en el fenómeno de relocalización de empresas o ‘nearshoring’ en la frontera norte de México, donde la industria maquiladora ha perdido más de 100,000 empleos en los últimos 18 meses, según un informe del Bloque Empresarial Fronterizo.

El reporte indica que 101,501 puestos de manufactura de exportación desaparecieron en ciudades fronterizas como Tijuana, Ensenada, Mexicali, Tecate, Nogales, Ciudad Juárez, Acuña, Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros. Esta pérdida representa el 10% de los 1,032 millones de empleos registrados en octubre de 2022, cuando se alcanzó el pico más alto.

Ciudad Juárez, que tiene el mayor número de empleos de este tipo en México, vio desaparecer 54,906 puestos laborales en solo 10 meses, según datos del Inegi.

Thor Salayandía Lara, presidente del Bloque Empresarial Fronterizo, advirtió a EFE que esta pérdida de empleos representa un “grave riesgo” para la economía de la frontera debido a su alta dependencia de la manufactura de exportación y su escasa diversificación económica.

Factores de Incertidumbre Política
El informe atribuye la caída del empleo a la incertidumbre política en México y Estados Unidos, donde ambos países enfrentan elecciones presidenciales este año.

Salayandía Lara prevé que la política económica de Estados Unidos cambiará después de las próximas elecciones, lo cual ya está afectando la economía fronteriza. "La industria manufacturera ha estado deprimida debido a la turbulencia e incertidumbre económica y política que vivimos tanto en México como en Estados Unidos", afirmó.

Obstáculos y Críticas al Gobierno Mexicano
Aunque el Gobierno de México ha destacado el ‘nearshoring’ como un motor económico clave, reportando 127 anuncios de futura inversión extranjera por más de 39,000 millones de dólares en 2024, el Bloque Empresarial Fronterizo criticó que los trámites para instalar maquiladoras son complicados y lentos, y señaló la insuficiencia de infraestructura, especialmente eléctrica.

“Hay muchas bodegas llenas de productos terminados y muchas de las empresas que tenemos aquí tienen como principal cliente a Estados Unidos. Desde el punto de vista de clientes, comercialización, manufactura y producción, todo está demasiado lento”, añadió Salayandía Lara.

Impacto en los Trabajadores
Lorenzo Quezada, un trabajador despedido de una empresa manufacturera, expresó a EFE las dificultades que enfrentan los trabajadores despedidos. “Hace 15 días me quedé sin trabajo por los contratos temporales. Hay que darle de comer a los chavos, pagar agua, luz y gas. Y ahora con estos calorones, el aire acondicionado también aumenta la luz”, lamentó.

Además, destacó que la contratación se ha vuelto más exigente, con compañías que requieren certificaciones formales. “Ayer fuimos a una fábrica de arneses y aunque tengo experiencia, dijeron que necesitaba estar certificado”, explicó.

Esta situación subraya la creciente dificultad para encontrar empleo en la región, a pesar de la experiencia previa en el sector manufacturero.