México impone aranceles a 544 productos para potenciar el nearshoring

A partir de este martes, México ha implementado aranceles temporales que oscilan entre el 5% y el 50% a la importación de 544 tipos de productos, con el objetivo de aprovechar los beneficios del nearshoring.

La medida, que tiene una duración de dos años según lo establecido por un decreto publicado por la Secretaría de Economía en el Diario Oficial de la Federación el pasado 22 de abril, afecta una amplia gama de productos, incluyendo acero, aluminio, textiles, confección, calzado, madera, plástico, productos químicos, papel, cartón, productos cerámicos, vidrio, material eléctrico, material de transporte, instrumentos musicales y muebles.

La Secretaría de Economía argumenta que esta acción es necesaria debido a la creciente adopción de nuevos modelos comerciales a nivel mundial, como el nearshoring, que busca acercar la producción al territorio de consumo. El objetivo es evitar distorsiones económicas que puedan afectar la relocalización de sectores productivos estratégicos y atraer nuevas empresas e industrias de alto valor agregado.

Esta medida también busca brindar certidumbre y condiciones justas de mercado a los sectores de la industria nacional que enfrentan vulnerabilidad debido a prácticas que afectan el comercio internacional. Además, se busca fomentar el desarrollo de la industria nacional y apoyar el mercado interno.

Para garantizar la competitividad en sectores industriales sensibles como el eléctrico, electrónico, automotriz y de autopartes, el gobierno federal mantendrá, durante el mismo periodo de vigencia de los aranceles, los beneficios arancelarios de los Programas de Promoción Sectorial aplicables a productos siderúrgicos.

La Secretaría de Economía argumenta que estas medidas son necesarias debido a la desaceleración económica causada por conflictos geopolíticos y comerciales entre 2018 y 2023, lo que ha afectado la competitividad de las cadenas productivas nacionales y la subsistencia del empleo. Por lo tanto, considera que las industrias mexicanas requieren un periodo de ajuste para su recuperación.

En conclusión, el gobierno federal busca implementar mecanismos que generen estabilidad en los sectores de la industria nacional y eliminen distorsiones en el comercio, salvaguardando el equilibrio del mercado global y cumpliendo con los compromisos internacionales adquiridos por México.