En la era de la alta tecnología, la Inteligencia Artificial (IA) y el aprendizaje automático están liderando una revolución en la productividad industrial. Estas avanzadas tecnologías no solo minimizan la subutilización de equipos hasta en un 62%, sino que también impulsan la productividad en un 10%, anticipan futuras legislaciones de sustentabilidad, incrementan las ventas de productos cosméticos y hasta pueden evaluar el estado de ánimo de un cliente bancario.
En un contexto global, empresas de todas las ramas industriales buscan redefinir sus operaciones para hacerlas más inteligentes, eficientes y sostenibles. La IA y los modelos de machine learning se han convertido en herramientas esenciales para alcanzar estos objetivos, según revela el informe "El potencial económico de la IA generativa" elaborado por McKinsey & Company.
Diversas industrias están adoptando de manera intensiva la IA, entre ellas la manufacturera, las cadenas de suministro, el diseño de productos y las soluciones tecnológicas de la información. Un estudio reciente realizado a más de 4,500 trabajadores de la industria tecnológica en Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Canadá, Alemania y Holanda, confirma que la IA ya es parte integral de sus labores diarias.
El 14.76% de los encuestados emplea la IA en menos del 10% de sus tareas, mientras que el 36.04% utiliza esta tecnología en casi una cuarta parte de sus actividades laborales. Además, el 36.97% realiza la mayoría de sus tareas con herramientas de IA generativa, y un 12.23% lleva a cabo casi todo su trabajo con estas avanzadas herramientas.
En este sentido, Stefanini Group, una empresa líder en el desarrollo de IA, ha demostrado cómo esta tecnología está transformando sectores clave como la banca, la industria cosmética, la logística, la fabricación de pinturas, la automotriz y la siderúrgica. La IA no solo mejora la experiencia del cliente y la productividad, sino que también genera ahorros significativos.
En el ámbito logístico, Stefanini Group ha creado una herramienta innovadora que utiliza datos en tiempo real de barcos y puertos para diseñar planes de desembarco estratégicos y personalizados, logrando ahorros millonarios en costos operativos.
En la industria automotriz, la empresa colaboró con un fabricante comprometido con la sostenibilidad, proporcionando decisiones basadas en datos sobre los productos presentes en las piezas y productos utilizados durante el proceso de fabricación, eliminando la evaluación manual constante de riesgos.
La IA está destinada a impactar positivamente en todas las industrias imaginables, con herramientas que previenen accidentes, optimizan recursos con una planificación más precisa, reducen el desperdicio y minimizan los tiempos muertos. Este avance tecnológico tiene el potencial de elevar significativamente los niveles de productividad en todo el mundo, marcando un hito en la evolución industrial del siglo XXI.