
Diputados aprueban reforma al IEPS: más impuestos a bebidas azucaradas, cigarros y plataformas digitales
20/10/2025

El pasado 16 de octubre, la Cámara de Diputados aprobó con 337 votos a favor, 126 en contra y sin abstenciones, la reforma a la Ley del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), que contempla un rediseño fiscal orientado a elevar la recaudación del Estado y atacar problemáticas sociales y de salud pública. La propuesta, aún pendiente de aprobación en el Senado, plantea incrementos sustanciales en las tasas aplicables a productos y servicios de alto consumo, pero con efectos adversos en la salud o el entorno, como refrescos, cigarros y apuestas digitales.
Desde el interior del Legislativo, fuentes cercanas al proceso señalan que la aprobación de esta reforma representa uno de los cambios más significativos en la estructura del IEPS en los últimos años. Entre los puntos más relevantes, destaca el endurecimiento del impuesto a las bebidas saborizadas. Se establecen ahora dos cuotas fijas diferenciadas por litro: 3.0818 pesos para bebidas con azúcares añadidos y 1.5000 pesos para aquellas que utilizan edulcorantes. La distinción, impulsada por el diputado Carlos Alberto Puente Salas (PVEM), busca incentivar el consumo de opciones menos dañinas para la salud.
Asimismo, el nuevo esquema fiscal impactará a los concentrados, jarabes y polvos, cuyo gravamen se calculará según los litros de bebida que puedan generar. Estas cuotas serán actualizadas anualmente y aplicadas al volumen efectivamente producido o vendido, con los ajustes correspondientes en caso de importación previa.
El impacto económico de esta reforma es significativo. De acuerdo con declaraciones del diputado priista Alejandro Domínguez, se espera que la federación recaude más de 40 mil millones de pesos mediante estos llamados “impuestos saludables”. Una cifra que refleja no solo la magnitud del consumo gravado, sino también la apuesta política por disuadir prácticas consideradas de alto riesgo para la salud pública.
Otros productos y servicios también verán ajustes fiscales relevantes. A partir de 2026, los refrescos y bebidas azucaradas duplicarán su carga impositiva, al pasar de 1.6451 pesos a más de 3 pesos por litro. Los sueros orales que no cumplan con los estándares de la OMS también estarán sujetos a esta tasa. En materia de tabaco, la reforma establece un incremento gradual en la tasa del IEPS, que pasará del 160% actual al 200% en un plazo de cinco años, además de incluir una cuota adicional por unidad que crecerá progresivamente hasta alcanzar 1.15 pesos por cigarro en 2030.
En un apartado novedoso, el dictamen incluye un impuesto especial del 8% para videojuegos con contenido violento, una medida que abre el debate sobre la fiscalización de productos digitales vinculados al comportamiento social. Además, los vendedores que operen a través de plataformas digitales estarán sujetos a una retención de hasta el 10.5% de sus ingresos, lo que marca un avance en la regulación tributaria del comercio electrónico.
Las casas de apuestas digitales, tanto físicas como en línea, también serán impactadas, con un aumento en la tasa del IEPS del 30% al 50%, reflejando una tendencia global hacia una mayor fiscalización de estas actividades.
En el ámbito cultural, la reforma modifica las tarifas de acceso a museos y zonas arqueológicas federales. Las nuevas cuotas —que entrarán en vigor en 2026— se incrementan en todas las categorías. Las personas nacionales y residentes legales en México podrán acceder a un descuento de hasta el 50%, lo que suaviza el impacto para el público local, pero marca una diferencia importante para el turismo internacional.
Aún falta que el Senado ratifique estos cambios para que entren en vigor a partir de enero de 2026. No obstante, desde el sector empresarial ya se han expresado reservas. Organismos como el Consejo Coordinador Empresarial han advertido que medidas como el aumento al IEPS en refrescos no atacan las raíces de problemas estructurales como la obesidad o el sobrepeso, y podrían afectar desproporcionadamente a sectores populares.
Mientras tanto, el gobierno federal avanza con una estrategia que combina salud pública y fortalecimiento de las finanzas, bajo un esquema que, según sus impulsores, busca corregir externalidades negativas del consumo sin frenar del todo el dinamismo económico. La discusión ahora se traslada al Senado, donde se prevé un debate igualmente polarizado entre los objetivos fiscales del Estado y el impacto social de las nuevas cargas impositivas.




El Parque Urueta se llena de arte con una nueva edición de “Rutas Culturales”

Diputados aprueban reforma al IEPS: más impuestos a bebidas azucaradas, cigarros y plataformas digitales

AIFA elimina cobro de casetas en rutas seleccionadas: aplica solo con pase de abordar

Entraron en vigor sanciones de EE.UU. contra CIBanco, Intercam y Vector por presunto lavado de dinero

