Nearshoring impulsa inversiones de 350 mdd en la fabricación de empaques

La creciente llegada de nuevas empresas a ciudades como Monterrey ha generado una inversión de aproximadamente 350 millones de dólares en la industria de fabricación de empaques en los últimos cinco años, según Carlos Jiménez, vicepresidente de packaging de Smurfit Kappa para Norteamérica y México.

Durante una entrevista, Jiménez destacó que en los últimos cinco años, Smurfit Kappa ha invertido más de 350 millones de dólares en sus operaciones en México, lo que ha fortalecido su posición para atraer negocios de las numerosas compañías que están trasladando su producción al país, así como de las que ya tienen presencia en la región. También anunció una inversión adicional de 12 millones de dólares en la planta de cartón corrugado de Tijuana a mediados de este año.

Estas inversiones han abarcado una serie de mejoras y expansiones, incluyendo la adquisición de una operación de cartón plegable en Monterrey, la incorporación de nueva maquinaria en ciudades como Nuevo Laredo, Nogales, Tijuana, Monterrey y Guanajuato, así como la implementación de una nueva impresora digital en Ciudad Juárez.

Jiménez subrayó que estas inversiones no solo han tenido un impacto positivo en el crecimiento del nearshoring en México, sino que también reflejan el compromiso de la empresa con un futuro más sostenible.

El vicepresidente de Smurfit Kappa prevé que para el año 2024, su presencia en la zona fronteriza contribuirá al fortalecimiento de las cadenas de suministro tanto en México como en Estados Unidos. Afirmó que factores como el costo de la mano de obra y la disponibilidad de energía eléctrica no restarán competitividad a México en términos de atraer inversiones.

Smurfit Kappa opera en 11 ciudades de México, con un total de 24 instalaciones para la fabricación de empaques, máquinas de producción de papel y centros de recuperación de materiales para reciclaje, además de un centro de experiencia donde colaboran aproximadamente 7 mil empleados. Sus principales clientes provienen de los sectores electrónico, electrodoméstico e industrial.

Jiménez reconoció que la industria del papel y el cartón fue esencial durante la pandemia, ya que se la consideró vital para garantizar la llegada de alimentos y medicamentos a las personas. La empresa pudo mantener el suministro ininterrumpido a sus clientes gracias a su enfoque integrado, produciendo papel en sus molinos para abastecer a sus plantas de corrugado. Además, se ha observado un aumento en la llegada de empresas de sectores como el aeronáutico, automotriz, alimentación y bebidas, y productos de consumo masivo a la región gracias al proceso de nearshoring.