Biden prohíbe la inversión de Estados Unidos en industrias de tecnología en China

Las recientes restricciones intensifican la confrontación entre las dos principales economías globales.

El presidente Biden intensificó la confrontación con China al firmar una orden ejecutiva que prohíbe las inversiones estadounidenses en industrias tecnológicas estratégicas que puedan fortalecer las capacidades militares de Pekín. Esta acción se suma a una serie de medidas que buscan distanciar a las dos principales economías mundiales.

La orden impide inversiones y el flujo de capital hacia esfuerzos chinos relacionados con semiconductores, microelectrónica, computadoras cuánticas y ciertas aplicaciones de inteligencia artificial. Aunque las autoridades de la administración Biden subrayaron la intención de salvaguardar la seguridad nacional, es probable que China interprete esto como parte de un enfoque más amplio para frenar su ascenso.

El Departamento del Tesoro comunicó que la medida es una acción limitada y complementaria a los controles existentes de exportación, reiterando el compromiso de mantener la apertura en las inversiones.

Esta orden se presenta en un momento de alta tensión en las relaciones entre Estados Unidos y China, comparable a los momentos más críticos desde el diálogo iniciado en los años 70. China ya había respondido con represalias debido a controles de exportación previos, afectando la cadena de suministro del Pentágono.

Biden busca estabilizar las relaciones con China después de episodios de conflicto, como el incidente con un globo espía y el descubrimiento de intentos de infiltración en sistemas de comunicación. Para ello, ha enviado funcionarios a retomar el diálogo, y se espera que la secretaria de Comercio, Gina Raimondo, viaje a China en las próximas semanas.

La administración argumenta que estas medidas son prudentes y necesarias para proteger tecnologías clave, un enfoque que debería haberse adoptado hace años.