La industria cementera en México avanza hacia una mayor sostenibilidad con innovaciones ecológicas

La industria cementera de México está implementando una serie de innovaciones para reducir su impacto ambiental, como el desarrollo de cementos con menor huella de carbono, la adopción de combustibles alternos, y la optimización de la eficiencia energética. Estas medidas buscan alinear las operaciones del sector con la Agenda 2030 de la ONU y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), respondiendo a la creciente demanda por una producción más respetuosa con el medio ambiente.

Según un estudio publicado por la revista Nature, la industria del cemento es responsable del 8 % de las emisiones globales de dióxido de carbono (CO2), debido a su dependencia de la quema de combustibles fósiles, la extracción de materias primas y los procesos de fabricación. Este impacto ambiental ha impulsado a empresas en México a tomar medidas decididas para reducir su huella de carbono.

En 2023, la Cámara Nacional del Cemento (Canacem) presentó la Hoja de Ruta México - FICEM, con el objetivo de reducir las emisiones directas de CO2 en un 17 % para el 2030, tomando como base las emisiones registradas en 2016 y alineándose con el Acuerdo de París. Dentro de este plan, la Canacem se comprometió a aumentar la tasa de co-procesamiento de residuos hasta un 32 % y reducir el contenido de clinker, el componente principal del cemento, en un 66 %.

Una de las empresas más destacadas en este esfuerzo es Cementos Moctezuma, que ha invertido más de 44 millones de dólares en el último año en iniciativas medioambientales, de seguridad y salud, así como en el crecimiento y eficiencia de sus operaciones. Maribel Leyte, directora corporativa de sostenibilidad, medio ambiente y mejora continua de Moctezuma, destacó que la sostenibilidad es el eje central de la empresa. "Desde hace años asumimos ese compromiso decididamente", afirmó Leyte, señalando que los objetivos y resultados establecidos en la Estrategia de Sostenibilidad y el Roadmap 2030 son la materialización de este compromiso.

Según el Informe Anual Integrado 2023, Moctezuma logró reducir sus emisiones de CO2 en un 10 % entre 2020 y 2023, alcanzando 562 kgCO2 por tonelada de producto cementante, y mejoró su eficiencia energética a 78,3 kWh por tonelada de cemento. Estos avances fueron posibles gracias a la modernización de sus plantas con tecnología de vanguardia, que optimiza la producción y reduce el impacto ambiental.

Como parte de su estrategia de sostenibilidad, Moctezuma también ha implementado programas de reforestación en las zonas donde opera. En 2023, la empresa plantó 955 árboles de 13 especies endémicas, contribuyendo a la conservación de la biodiversidad local. Además, la cementera promueve el uso responsable del agua en sus procesos productivos, mediante sistemas de recirculación y tratamiento de aguas residuales, reutilizando más de 88,000 metros cúbicos de agua al año.

Cementos Moctezuma también ha apostado por la innovación en sus procesos productivos, incorporando combustibles alternativos en su cadena de producción. En 2023, procesó más de 21,000 toneladas de residuos, incluidos 7,000 toneladas de llantas, lo que equivale a aproximadamente 600,000 neumáticos reciclados.

Con vistas al futuro, la empresa tiene planeado un cambio importante en su marca. Para 2025, todas sus marcas de cemento y concreto se unificarán bajo el nombre comercial "Moctezuma", lo que, según José María Barroso, director general de la empresa, será una oportunidad para reiterar su compromiso con México y su gente, su cultura y su biodiversidad.

La industria cementera mexicana continúa avanzando en su transformación hacia un modelo más sostenible, respondiendo a las demandas globales y locales para minimizar su impacto ambiental y adaptarse a las tendencias del mercado.